Declaraciones de GRUCORPO tras acciones de la Policía en el paro nacional del 1 de mayo
La manifestación de ayer fue una sumamente exitosa, en la que participó una amplia diversidad de sectores y se logró una concurrencia extraordinaria, histórica, con una serie de mensajes y exigencias más que pertinentes en este momento que atravesamos como País.
Las personas que incurrieron en conducta delictiva no representan a todas las personas y agrupaciones que se organizaron. Observadores de GRUCORPO vieron ejemplos de algunos manifestantes (sindicatos y estudiantes) que buscaban la manera de neutralizar y anular los elementos desestabilizadores de grupos conocido como “encapuchados”.
Aún con este o cualquier otro incidente que ocurriera, las personas tienen el derecho de manifestarse por las políticas draconianas de este gobierno y de la junta de control fiscal.
La Policía de Puerto Rico cometió varias violaciones en el día de ayer, como también lo ha hecho en las protestas de las últimas semanas, que GRUCORPO ha presenciado y observado:
- Movilizaron un exceso de fuerza policiaca: Desde SWAT, Operaciones Tácticas, helicóptero de FURA, cientos de agentes, todo para reprimir una manifestación protegida por la Constitución de Puerto Rico, la de Estados Unidos y por normas internacionales sobre la libre expresión.
- La Policía está reprimiendo las protestas con el uso de gases lacrimógenos, gas pimienta, balas de goma y macanas. En ningún momento se hicieron las debidas advertencias antes de utilizar los agentes químicos o dispersar a las multitudes, como lo requieren sus políticas de uso de fuerza.
- Además, han hecho uso de los agentes químicos y otros mecanismos de fuerza sin importar la presencia de niños, niñas, envejecientes e incluso mujeres embarazadas, como evidenciamos ayer.
- La Uniformada insiste en utilizar agentes infiltrados y encubiertos durante las manifestaciones, lo que quedó evidenciado ayer con los videos del agente Iván Bahr y un grupo de sus infiltrados, así como de encapuchados que intercambiaban información animadamente con agentes de la policía. Noticentro 4 transmitió los videos sin editar de un grupo de encapuchados que rompían los cristales del Banco Popular y, sin embargo, con todo el exceso de presencia policiaca que hubo durante la manifestación, ningún policía los arrestaba. Nuestra historia está llena de instancias en que la propia Policía cometió delitos y tendió trampas a los jóvenes para desmerecer públicamente las luchas por la justicia social. No nos pueden seguir engañando con esas tácticas antiguas que ya conocemos muy de cerca.
- Como ya hemos denunciado antes, la práctica de llevar infiltrados y encubiertos a las manifestaciones es una extremadamente peligrosa, más aún cuando se ejecuta en el contexto de manifestaciones y ejercicios de expresión protegidos por nuestra Constitución y la de Estados Unidos. Sin lugar a dudas, las manifestaciones de estudiantes no son lugares para llevar a cabo esta práctica abusiva que desincentiva el ejercicio democrático de nuestro derecho a la disidencia, a la protesta y la participación política. No puede aceptarse la presencia de agentes encubiertos en actividades de libre expresión de la ciudadanía, menos aún habiendo personal uniformado desplegado en el área.
- El señor Bahr es un conocido violador de derechos civiles con amplio historial represivo contra los y las estudiantes. Es inverosímil que este señor, cuyas acciones ilegales durante las protestas estudiantiles del 2010 fueron detonantes de la actual Reforma de la Policía, todavía esté a cargo de operativos anti constitucionales, arrestos ilegales y entrampamientos en las manifestaciones.
- La Policía de Puerto Rico tampoco está identificando correctamente y a tiempo la cadena de mando en sus operativos, lo que dificulta el trabajo de observadores y mediadores.
- Cuando arrestan a los estudiantes, les niegan el acceso a sus abogados y familiares, lo que también es una violación a sus derechos y garantías constitucionales y pone en entredicho la actitud, voluntad y compromiso de la Policía con una transformación hacia una uniformada profesional, comunitaria y respetuosa de la Constitución.
- Al insistir en la violación de derechos fundamentales, la Policía de Puerto Rico traiciona la reforma de la Policía.
Ahora más que nunca, en este momento neurálgico en que nuestra ciudadanía pierde derechos, pierde facultades democráticas y su calidad de vida se empobrece aceleradamente, la reforma de la policía tiene que protegerse y enaltecerse. Nuestro país necesita una policía que garantice seguridad y derechos a todas las comunidades del País, especialmente a las más desventajadas, incluyendo a las personas que se sacrifican por el colectivo y salen a la calle a protestar y ejercer sus derechos.
No vamos a permitir que los eventos de ayer se tornen en una excusa para que el Gobierno criminalice la manifestación. Es obligatorio separar una cosa de la otra. La manifestación constituyó un ejemplo del ejercicio legítimo de libertad de expresión, que por ser un derecho fundamental amerita la mayor protección. Además, tampoco debe ser una excusa para que, ante manifestaciones en el futuro, los cuerpos policíacos ignoren la Constitución, so color de un posible “disturbio civil” o “motín”. Por el contrario, en virtud de la Reforma de la Policía se han diseñado protocolos para atender precisamente este tipo de situación de forma constitucional, sin necesidad de reprimir una manifestación legítima. Los eventos de estos días han puesto a prueba la Reforma, y por lo que hemos observado, queda mucho por trabajar.
GRUCORPO, por su parte, seguirá monitoreando las prácticas de la policía para asegurar que los oficiales cumplan con la Constitución en el ejercicio de sus deberes ministeriales.