El Lcdo. Josué González, abogado en ACLU of Puerto Rico y portavoz de GRUCORPO, envió una comunicación a la Oficina de Reforma de la Policía de Puerto Rico y al monitor federal, Arnaldo Claudio, expresando nuestra preocupación por los comentarios emitidos hoy por Policía De Puerto Rico La Revista (en Facebook) incitando a los agentes de la Policía a arrestar a personas que los “insulten”. El comentario está ilustrado con la foto de un manifestante siendo arrestado en una protesta.
No hay duda de que existen circunstancias que justifican el arresto de una persona en una protesta siempre que existan motivos fundados de que esa persona en particular en realidad cometió una infracción a la ley, y que la decisión de arrestar no esté vinculada a la intención de acallar la manifestación.
Es importante que los y las oficiales de la Policía sepan que, en términos generales, pueden darse expresiones que, aunque ofendan la sensibilidad de alguna persona u oficial, siguen siendo protegidas por la Constitución y cuya censura y represión representan una violación de derechos fundamentales. Así, invitar de forma preventiva a los oficiales de la Policía a que hagan arrestos en manifestaciones por supuesta alteración a la paz es una invitación innecesaria a la censura, la hostilidad entre las partes y la violencia. A tenor con los principios que rigen la Reforma de la Policía, además de mantener la seguridad pública, es el deber de la Policía proteger, fomentar, adelantar y facilitar el ejercicio de derechos fundamentales.
Las propias órdenes generales de la Policía prohíben arrestar personas solo porque insulten a un oficial de la Policía: “El abuso verbal contra los miembros de la Policía de Puerto Rico NO constituirá una razón justificada para realizar un arresto o hacer uso de fuerza”, lee la Orden General 600-625 Manejo de multitudes Policía de Puerto Rico.
Nos preocupa que estas expresiones se hayan hecho hoy, a dos días de que se celebre una protesta contra la Junta de control fiscal en Fajardo.
Por otro lado, la revista en cuestión no es oficial de la Policía pero usa sus logos, su nombre, tiene más de 250,000 seguidores, la gran mayoría de los agentes la leen y es habitual que cuelgue información que incita a la violación de derechos, enlaces de contenido sexista, violentos, historias amarillas que además nada tienen que ver con la labor de seguridad y protección de derechos de la Policía.
La Policía tiene perfecto conocimiento de esto y debe tomar acción para contrarrestarlo. Por ejemplo, en sus redes sociales oficiales podrían diseminar la información correcta acerca de este asunto tan neurálgico. Los autores son policías que no solo confunden y vician la educación de los demás oficiales sino que afectan la reputación del propio Departamento y su gestión de reforma.
El asesor técnico de cumplimiento federal de la Policía, coronel Arnaldo Claudio, y la Teniente Coronel, Clementina Vega, directora de la Oficina de Reforma, recibieron las preocupaciones de GRUCORPO y se comprometieron a discutirlas con el superintendente José Caldero con el fin de abordar esta negligencia.